Grace, el amor incondicional de una madre.

"Grace" es la nueva película independiente del joven y prometedor director Paul Solet, que ha cosechado muy buenas críticas en el reciente Festival de Sundance.

La película nos cuenta la historia de Madeline Matheson, embarzada de 8 meses y deseosa de tener, por fin, a su hija Grace. A causa de un accidente el feto muere estando todavía en su interior, pero Madeline insiste en seguir adelante con el embarazo. Semanas después, tras el parto, el bebé, milagrosamente, vuelve a la vida. Pero, tras regresar a casa, la salud de la pequeña Grace empieza a deteriorarse. El apetito del bebé por la leche materna se transforma en una siniestra ansia por consumir sangre humana, y Madeline se verá obligada a descubrir hasta dónde está dispuesta a llegar para salvar a su hija.

Implicado en el proyecto, a modo de productor, encontramos el nombre del siempre interesante e hiperactivo Adam Green (era de esperar...)
En lo que se refiere propiamente a la película, parece inevitable acordarse de esa salvajada francesa titulada "Baby Blood" que, a principios de los 90 tuvo cierta repercusión gracias a sus bien generosas dosis de gore enfermizo.

Todavía no hay estreno para su fecha de estreno (supongo que irá directa al mercado DVD USA), pero no creo que tarde demasiado en producirse.